Close
Utiliza el cupón mesdelamadre para obtener un 20% descuento en toda la tienda

Desintoxicar para restablecer la salud 

octubre 16, 2023

Nuestros cuerpos tienen una capacidad natural para desintoxicarse de manera constante, incluso sin que lo notemos. Sin embargo, en la actualidad, nos enfrentamos a una sobreexposición de toxinas –como metales pesados y pesticidas– que pueden sobrecargar nuestros sistemas de desintoxicación. Los síntomas comunes que experimentamos, como migrañas, cansancio, acné o presión arterial alta, muchas veces pueden relacionarse con el exceso de toxinas en nuestro organismo. Este exceso afecta a todo nuestro sistema y puede ser un precursor de problemas de salud. La carga tóxica adicional en nuestro cuerpo es un factor que contribuye a diversas enfermedades.

Sin embargo, existen maneras para apoyar a nuestros cuerpos con la eliminación de estas toxinas, tanto con plantas medicinales, una dieta apropiada y la sudoración. La invitación es a utilizar las plantas medicinales, sabias maestras que nos ayudan a equilibrar nuestro universo interno, tanto físicamente como emocionalmente. 

Detox como protocolo de prevención 

Existen diversos órganos responsables de la depuración y desintoxicación del cuerpo, sin embargo, el hígado es uno de los más importantes. El hígado y la vesícula trabajan en sinergia, como los principales órganos depuradores del cuerpo. El hígado se encarga de filtrar casi todo lo que ingresa en nuestro cuerpo –razón por la cual la mayoría de los fármacos tiene un efecto detrimental en este órgano–; metaboliza las proteínas, los carbohidratos y los lípidos; sintetiza el colesterol y los ácidos biliares; biotransforma las toxinas y drogas, produce proteínas para la sangre y tiene funciones importantes para el sistema inmunológico. La vesícula por otro lado, guarda el bilis que es fabricado por el hígado, el cual ingresa al tracto digestivo y nos ayuda a digerir la grasa. Si el hígado no funciona bien, es probable que la vesícula tampoco. 

El hígado se puede regenerar luego de una lesión –producto de una intoxicación– o una enfermedad –tal como un virus hepático–, pero si la patología progresa más allá de la capacidad de regeneración, el metabolismo completo se podría ver severamente afectado. Si el hígado no funciona bien, las toxinas se terminan depositando en nuestras células, aumentando los radicales libres –que provocan daño celular– y otros graves problemas a la salud. El hígado es el único órgano capaz de eliminar algunas toxinas como pesticidas, preservantes y microplásticos, por lo que es clave desintoxicarlo para que pueda retomar su función clave en nuestro organismo. 

Reducir las fuentes de toxinas

Además de desintoxicar, es clave identificar las fuentes de toxinas para nuestros cuerpos, ya que estas son múltiples, para así reducir nuestra exposición a ellas. Muchas fuentes son inevitables, tal como lo es el aire que respiramos en las grandes ciudades, sin embargo, podemos tomar un rol activo en prevenir la exposición a otras fuentes.  En general, al hablar de toxinas se incluyen los contaminantes, químicos sintéticos, metales pesados y comidas procesadas. Las fuentes más evitables son: el agua potable (puede contener metales pesados en abundancia), los sartenes antiadherentes (contienen plásticos y metales pesados que terminan contaminando los alimentos), el humo de cigarrillo, la comida procesada (contiene preservantes muy dañinos para la salud), y también las frutas y verduras que no son cultivadas de manera orgánica (contienen altos niveles de pesticidas peligrosos para la salud). Esta lista podría extenderse, sin embargo, es clave no abrumarnos y tomar un rol activo en ir eliminándolos (o reduciéndolos) en nuestro día a día. 

Desintoxicar responsablemente

Tenemos una capacidad innata para desintoxicarnos y podemos utilizar plantas medicinales para asistir en ese proceso. Sin embargo, es importante hacerlo responsablemente. En complemento al poder de las plantas, durante el período de depuración –y ojalá de manera contínua– es importante hidratarnos, dormir al menos 8 horas, no fumar ni tomar alcohol disminuir los alimentos procesados, la cafeína y el azúcar, comer alimentos antioxidantes y antiinflamatorios, incluir prebióticos, mover nuestros cuerpos a través del ejercicio suave y respirar profundamente. 

Además es clave comprender que existen otros órganos depuradores en nuestros cuerpos y que es importante desintoxicarlos también. De hecho, se recomienda depurar el cuerpo en un orden específico: desde adentro hacia afuera. Esto es porque al mover las toxinas del hígado, si no limpiamos nuestro colon y riñones previamente, es posible que las toxinas vuelvan a circular por el cuerpo y se depositen en otro lugar. En ese sentido, el colon debería ser el primer órgano a desintoxicar. La lógica de esto es que debemos vaciar el colon para poder habilitar esta vía de evacuación, que muchas veces –producto de nuestras dietas bajas en fibra– se encuentra estancado. Luego podremos continuar con los riñones, después la vesícula y el hígado, seguidos por los pulmones y la piel. 

El Diente de León se utiliza para proteger el hígado y la vesícula, aportando en la producción de bilis.

El hígado, la vesícula y las emociones: 

Según la Medicina Tradicional China, con la primavera ingresamos a la estación regida por el elemento madera y en nuestro cuerpo este elemento corresponde al hígado y la vesícula biliar. Estos órganos están sobrecargados por el exceso de toxinas o emociones no expresadas durante el año, donde la energía se bloquea. Si la energía circula libremente, el espíritu está en paz. Todas las emociones encuentran un hogar en nuestro cuerpo y el hígado es la sede de la ira. El hígado en equilibrio nos da la capacidad de la flexibilidad, la paciencia, perseverancia, tolerancia, la capacidad de visión y la adaptación; el hígado en desequilibrio nos provocará irritabilidad, intolerancia, impaciencia, agresividad, frustración y rigidez, generando bloqueos musculares o espasmos. Por esto, al desintoxicar nuestro cuerpo, también podemos regular nuestras emociones. 

Restablecer la salud con plantas medicinales 

Las plantas nos pueden proporcionar una tremenda ayuda para restablecer el equilibrio –tanto físico como emocional– en nuestro cuerpo a través de la depuración y limpieza. Algunas de las plantas aliadas para depurar el hígado y la vesícula incluyen: Diente de León (Taraxacum officinale), Cardo mariano (Silybum marianum), Gengibre (Zingiber officinale), Ortiga (Urtica urens), Chisandra (Schisandra chinensis), Zarzaparilla (Smilax aspera), Carqueja (Baccharis trimera) y muchas más. El tratamiento de patologías del hígado con plantas medicinales se está estudiando en profundidad, sin embargo, estas plantas se han utilizado por milenios para tratar estas afecciones, siendo herramientas claves para mantener y restaurar nuestra salud. 

Al desintoxicar el cuerpo podemos vernos  beneficiados con resultados a corto plazo y también a largo plazo. A corto plazo está el aumento de energía, claridad mental, estado de ánimo elevado, disminución de dolores musculares y mejoras en la piel. A largo plazo, el cuerpo estará mejor equipado para combatir radicales libres y estrés oxidativo, así previniendo –y tratando– las enfermedades más comunes de nuestros tiempos. 

Referencias:

Beinfield, H., Korngold, E. (2013). Between Heaven and Earth: A Guide to Chinese Medicine. United Kingdom: Random House Publishing Group.

Chasteen, Olivia. Udemy: an introduction to herbal detox. https://www.udemy.com/course/herbal-detox/

Hoffman, D. Medical Herbalism: the science and practice of herbal medicine: Rochester, Vermont. Healing arts press. 

Comparte

RElacionados

Adaptógenos: plantas y hongos para tiempos modernos

Por Equipo Flora y Espora

Perfil del Sauco